Los conciertos volvieron al Gran Teatro Liceu de Barcelona pero ante un público muy particular. Sus butacas estaban ocupadas con 2.292 plantas. La acción artística de Eugenio Ampudia consistió en un concierto de seis minutos en el que cuatro intérpretes representaban el Crisantemi de Puccini. La actividad invitaba a los ser humano a reflexionar sobre “la sostenibilidad” y “las relaciones con la naturaleza”.
El emblemático teatro de ópera retomó el lunes su actividad luego de dos meses de permanecer cerrado. “Pensé ¿por qué no entramos como malas hierbas dentro del Liceo y lo colonizamos y empieza a crecer por todas partes naturaleza y lo convertimos en algo vivo, incluso cuando no hay personas?”, explicó Ampudia en una rueda de prensa.
Es “un poema visual que, a la vez, es una sutil metáfora que nos devuelve una sonrisa”, indicó el director artístico del Liceu, Víctor García de Gomar. El concierto se emitió en directo por la web del teatro para que los interesados se lo pudieran reproducir a las plantas que tienen en casa.