Un grupo de 16 adolescentes, incluida la argentina de 17 años Chiara Sacchi, junto a la activista Greta Thunberg, denunciaron ante la ONU a Argentina, Brasil, Francia, Alemania y Turquía por no proteger a los niños del mundo, del impacto que genera el cambio climático. “No han cumplido sus promesas”, denunció Thunberg, al margen de la cumbre climática de la ONU.
Los jóvenes se han valido de un “protocolo opcional”, por el cual se autoriza a los niños a presentar una queja ante el Comité de los Derechos del Niño de la ONU, si estiman que sus derechos fueron denegados.
Las recomendaciones no son vinculantes, pero los 44 países que han ratificado este protocolo están de acuerdo en principio en respetarlas, están incluidas algunas de las acciones exitosas en los campos de los derechos humanos, discriminación y ley antimonopolio, explicó Michael Hausfeld, uno de los principales litigantes civiles de Estados Unidos, quien espera que se emitan directrices en los próximos 12 meses.
Con esta presentación, se supone que el comité debe investigar las presuntas violaciones y luego hacer recomendaciones a los Estados para detenerlas.
Alexandria Villaseñor, apodada la Greta Thunberg estadounidense, cuestionó que “a todos nos han violado y negado nuestros derechos”, por lo que enfatizó: “Nuestro futuro está siendo destruido”.
Chiara Sacchi, es la única argentina que forma parte de una red global sin fines de lucro llamada Slow Food, además, colabora con una organización que trabaja en la limpieza y preservación de especies en los océanos y en el programa La Voz de la Juventud.
Los cinco países incluídos en la queja han ratificado el protocolo, pero se encuentran entre los más contaminantes del mundo y son influyentes en el selecto club de países ricos del G20. Por eso fueron incluidos, en lugar de Estados Unidos, China o India, los mayores emisores del mundo, pero que no han ratificado este protocolo. Casi todos los países -excepto Estados Unidos- han ratificado esta convención para proteger la salud y los derechos de los niños.
